04 Nov Maduración de los aguacates

El aguacate (persea americana) es una fruta de las llamadas climatéricas. Tiene la capacidad de seguir madurando una vez que se ha recolectado, como hacen los plátanos, tomates,  manzanas, fresas, etc. Estos frutos sintetizan etileno para arrancar el proceso de maduración. Sin embargo los aguacates van un paso más allá para empezar a madurar; necesitan que se recolecten del árbol. Eso sí, una vez hayan alcanzado un estado de desarrollo adecuado. De hecho, el mejor almacén para tener los aguacates disponibles es el propio árbol. Esto lo podemos comprobar fácilmente en el campo cuando nos encontramos algún fruto caído al pie del árbol, normalmente por viento, y que ha madurado de manera natural en el suelo, estando los demás verdes en el propio árbol.

En una explotación agrícola, para saber cuando se ha alcanzado el estado idóneo para recolectarlos, hay que fijarse en varios factores: tamaño de la fruta, aspecto del aguacate etc. Se pueden hacer pruebas de varios tipos para determinar el momento idóneo, pero quizás la más adecuada sea  ver el índice de materia seca de un fruto. Una vez alcanzado de un 20 a 23% de materia seca, dependiendo de las variedades, ya se puede empezar la recolección. De una forma más simple y rápida aunque algo menos precisa se puede hacer la deshidratación en un microondas.

Por supuesto, quién mejor determina si se ha alcanzado el estado óptimo para la recolección, es nuestro paladar, pues una vez hayan madurado podremos determinar si tienen ya las suficientes propiedades organolépticas para continuar con su consumo.

La temperatura ideal para la maduración del aguacate está en el rango que va de los 18 a los 24 grados centígrados. Por encima de los 25 la maduración se produce de una manera irregular. Podemos acelerar unos días esta maduración si ponemos en una bolsa de papel unos aguacates junto con alguna pieza de fruta que también emita etileno, un par de manzanas o plátanos. O simplemente los dejamos en  el frutero.

Lo que si hay que tener en cuenta es que cuando se inicia la temporada de recolección, se necesita más tiempo para que el aguacate madure que cuando la misma está ya avanzada.

Cuando compremos aguacates y tengamos que madurarlos, nos tenemos que fijar en su fecha de recolección y el tiempo que tardan en madurar, que seguro que para cada uno de nosotros va a ser diferente en función de las condiciones existentes en nuestro hogar. Una vez conocido este tiempo, podemos planificar nuestras compras con antelación en previsión de tener aguacates maduros para las fechas en las que los queramos consumir. Si en algún momento se nos maduran a la vez mas aguacates de los que queremos, en cuanto empiecen a madurar podemos guardar algunos en el frigorífico, que aguantarán unos días más.

Escrito por:

Julio Castro Gutiérrez